Lo que las redes pararon

Hay días en que me pregunto cómo he conseguido dejar de tener tiempo para aquello que me gustaba, para aquello con lo que he disfrutado siempre o incluso aquello que siempre tuvo un valor añadido. Y lo he pensado justo al abrir el blog y darme cuenta que cada vez me cuesta más escribir de una manera consciente mis ideas o pensamientos. He dicho consciente sí, porque gente, la redes sociales también cortan alas….

Las agujas del reloj

Me supongo que hay muchas cosas o momentos con los que no contabas al convertirte en madre, pero sobre todo no contabas con tener momentos donde el alma te pida parar el  reloj, porque la pena te apodera. Hoy escribo en la soledad de un piso sin ruido y en silencio, donde abro y cierro  cajas con la automaticidad que lo hago desde hace casi siete años cada 5 meses.

LOCURA TRANSITORIA

Cuando  estaba embarazada de neskatilla tenía muchas cosas claras, demasiadas. Cosas que  se han desmontado de un soplo al ver una serie de televisión. Y si no se han desmontado sencillamente han salido a la superficie de una manera que asusta. La maternidad es algo que en su día soñé, que con la experiencia amé y renegué de ella y con el tiempo sencillamente me ha dejado un tatuaje para toda la vida.