Cuando el virus llega los abrazos se van….

Supongo que en Abril  cuando escribí aquel post nunca pensé lo que la vida me deparaba…me ha costado escribir este post pero estaba viendo la Marató de TV3 que este año va para la investigación del puto virus y me han podido las lágrimas. Y me supongo, que también me puede ver que se acercan las navidades y me supera el panorama. El coronavirus llegó a mi casa un 14 de noviembre y no se fue hasta el 14 de diciembre y con él se llevo parte de mi salud, de mi alegría, mi energía y mi trabajo, pero sabes lo mejor, a mí  me dejó contarlo y superarlo con una sonrisa que muchas veces se tiñe de tantos achaques que me ha dejado.

LO QUE EL CONFITADO HIZO EN MI

Ayer me di cuenta que estamos viviendo algo excepcional del cual no he dicho nada por aquí. También es verdad que no tengo muchas ganas de pronunciarme sobre ello porque es complejo, pero no dejar huella de algo histórico en mi blog personal me parecía que no estaba bien. Iba deciros eso de llevamos taitantos días “confitados” pero dejé de contarlos a los veintitantos. Que te escribo este texto en el peor de los momentos que he tenido hasta ahora, llevo 4 días que no veo la luz aunque me ponga una bombilla delante de la cara. Pero vamos que es lo normal, creo que más de la mitad de la población ha vivido este proceso como si estuviera en un parque de atracciones con pase Premium, subiendo y bajando sin control y dándolo todo o queriendo que sea la […]