No sé si vuestra memoria y afición al blog llega a estos niveles, pero al comienzo del año pasado escribí un post sobre mis deseos para el 2014, ya que dije que yo pasaba que fueran propósitos y estresarme más de lo debido. Pues para mi grata sorpresa para mediados de año el saco ya estaba casi vacío, vamos que si no me equivoco me ha quedado como bien decía el título de aquel post “una más pal saco”. Casualmente también escribo este post después de haber dejado mi tarjeta temblando con las compras online, está claro que a mí en situaciones extremas es mejor dejarme sin posibilidades de consumir sino mal vamos…la diferencia es que esta vez al contrario que en ese post no tengo tiempo ni para rellenar mis datos personales de mi primera compra, así que veo […]
Categoría: El Mundo por Peineta
UN TUNEL LLAMADO PUERPERIO
De noche, cuando se supone que debería estar durmiendo me encuentro cual búho nocturno tecleando, pero saben eso de “aprovecha para dormir cuando ella duerme”, es fácil de decir pero cuando después de un mes y medio tu cuerpo está más loco que con jetlag es complicado. Tan complicado como que tú te quedas dormida cuando ellas está despierta y a la inversa… Señores hoy vengo a desmitificar otra gran etapa de la maternidad, en mi línea. Hoy le toca al puerperio, postparto o esos tres meses en los que te planteas tirarte por el balcón y te preguntas porque no te pusiste condón, y no uno sino dos o tres uno encima del otro. Se supone que yo no soy novata en esto, pero cuatro años largos casi para cinco, pesan mucho y fue duro de narices, porque para […]
EL DON DE LA PROVOCACIÓN
Desde mi letargo preñil y una vez más poseída por los virus varios que han decidido invadirme en cada mes de gestación retomo la escritura. Mi intención hoy era hacer un post sobre un tema menos serio y más liviano, pero mi vena boca-chancla revolucionaria no me lo ha permitido. A pesar de mi desconexión del mundo y de la tele estos tres días, lo poco que he podido oír, leer y ver han hecho que mis pupilas lleguen a dilatar más que en un parto sin epidural. Este país avanzado y cariñosamente denominado de pandereta…se va superando día a día, principalmente gracias a la elocuencia verbal y cerebral de cierto dirigentes políticos que por pura coincidencia pertenecen a ese gran partido gaviotero que lleva este país hacia su estado más retrogrado, carca y dictatorial diría yo (es mi humilde […]
El precio de la moneda
Les voy a ser sincera las hormonas no ayudan mucho a gente como yo que se plantea y replantea su vida en cada momento crucial en el que va a sufrir una metamorfosis. Tengo claro que los torbellinos mentales que estoy padeciendo estos días, en la soledad de mi cama son una suma de hormonas, más una vida metida en cajas por causa de una reforma y todo esto aliñado con latigazos en la memoria y el alma que me produce cada viaje a tierra patría.
El síndrome del pajarraco
Dícese de ese síndrome que tiene como origen el “síndrome del nido” muy habitual en embarazadas pero que en algunos casos concretos se agudiza de tal punto que termina convirtiéndose en efecto pajarraco. Vamos que para que limpiar tu casa y adecentar un pequeño espacio para un ser que solo va a medir 50 centímetros, pudiendo reformar toda la casa y complicarte la vida eh ¿Para qué? Pues eso para hacer el pajarraco terminar como una regadera y con el nido de sombrero mientras soplas una turuta al estilo loquero.
Tiempo de Cosecha
Mi amama solía decir aquello de “manos que no dan que esperaran “y “uno recoge lo que siembra”, todo esto con su buen acento vasco, era una mujer de campo y se le notaba y a pesar de no ser muy parlanchina, porque según ella para eso ya estaba yo y mi vena gitana, solía ser parca en palabras pero cargadas de mensajes. Nunca me dijo nada, a pesar de verme muchas tardes cerca de su delantal mientras pelaba las vainas o jugando a la brisca y los seises un sábado por la tarde, cuando sabía que mis “amigos” estaban en la plaza. Ella lo tenía claro, yo era muy diferente y ese pueblo no estaba hecho para una farandulera como yo, o no por lo menos en aquellos tiempos. Se fue como se vino, sin hacer mucho ruido y tras […]
Mi ventana particular
Me ha llegado una notificación de mi procesador de blog para avisarme que se acerca el aniversario de mi blog, sí señores mañana mi loca casa cumple dos años, ni más ni menos. Antes que nada si esperas el sorteo de algo maravilloso, o el regalo de tu vida, no sigas leyendo este post, porque la raruna de su propietaria este año no está por la labor, por eso de romper moldes.
EL HOSPITAL, una cárcel con visitas restringidas
Hoy vengo a hacer terapia de embarazada, pero terapia de la dura, es decir como mi blog es mío escribo lo que quiero, eso sí sois libres de seguir o plantaros aquí. Me supongo que pasar cierto tiempo con la familia propia y la política hace estragos, es mi caso esta semana de pascua. Vengo dispuesta a desgranar el tema hospital-parto visitas desde lo más hondo de mis entrañas, porque saben que parir es algo muy íntimo y personal como para tener que sufrir corsés y estereotipos implantados por esta nuestra sociedad española.
Tener princesas, a veces sale caro
Fui madre hace 4 años porque lo quise, lo pedí, lo busque con ahínco y pasión un mes de Marzo. Lo viví como una diosa, una venus flipada con un balón de futbol perfecto en su vientre. Comí, baile, nadé, disfrute y sufrí un parto de narices, después de eso me convertí en lo que el diccionario denomina como MADRE, especifico, madre a secas, sin más (ya algunas entendéis). Me supongo que estos serían argumentos suficientes para plantearme volver a pasar por el maravilloso trance. Pues no se crean, debo de tener un subconsciente de lo más sensato porque cuatro años ha tardado en dar luz verde y así en confianza les diré que la luz era ámbar, esa de sí pero no pero con cuidado…Pero siempre hay un espermatozoide listo que se cuela y se salta el semáforo.
Secretos de Alcoba
Cuando fui madre por primera vez, o mejor dicho cuando supe que estaba embarazada tuve las cosas muy claras, yo quería una niña, pero entonces llegaron las pruebas los resultados negativos y sólo quería que estuviera bien, el sexo me la traía al pairo… extraño pero así fue y el monillo fue él bebe niño más guapo, majo y bonachón que había visto en mi vida, ya era de la liga de los niños!!! Pero señores no hay que engañarse , la que es es, y con el monillo ya en vida y unos cuantos meses solía yo pasearme por los palacio de Amancio, comprando bermudas y camisetas mientras mis ojos se iban a la sección niña, cual ex drogata visionando un campo de opio.